viernes, 27 de marzo de 2009

Escribido sobre escribidor




Osea, no se realmente porque me pongo a escribir. Tampoco se si me gusta escribir de verdad. Creo que es una especie de liberación mental, porque soy una persona que aunque pueda parecer super sociable tiendo a cerrarme en mi mismo y a no soltar lo que siento. Obvio que esto último es super contraproducente para mi mismo. ¿Será porque nunca fui a un psicólogo y nunca me acostumbre a largar las cosas?.No se, esto último se puede cosiderar tirada de fruta. Osea, siempre tuve y tengo gente dispuesta a escucharme, pero tengo esa maldita manía. Por eso escribo creo. Da la casualidad que empecé a escribir en 2005.
Uf, año en el que desvarié demasiado. Peleas sumamente tontas, más un montón de factores que no vienen al caso me hacían sentir mal. Verdaderamente mal por momentos. Y cuando volvía a casa del liceo, me surgía esa veta literariaria.

Tampoco me gusta lo que escribo. Casi que no lo puedo volver a leer porque me parece estúpido y malo. Eso es una cagada. Lo que escriben los demás (dónde incluyo a muchísima gente) me parece ingenioso o fino o delicado y tan simple que me fascina. Pero lo mío siempre tiene un algo que al principio está bueno pero que después me parece vulgar y detestable. Es más, lo que estoy escribiendo ahora creo que me gusta, pero seguramente luego me parezca mierda frita.

Quiero hablar sobre algo, pero nada me convence. O sino charlar con alguien, pero en el Messenger no hay nadie "interesante" (que nadie se me ofenda, aunque de los que puedan llegar a entrar a leer el blog ninguno está conectado) para hablar sobre "X". Bueno, creo que me tomo el antigripal y me voy a la cama.

Ta luego.

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